Este es un blog donde la política, el fútbol, la literatura y el cine se ven desde otra óptica aunque suene a un cliché pero como bien decía Hitchcock en ocasiones es mejor partir de un cliché para llegar a algún lado que partir de algún lado y terminar en un cliché y eso es lo que trata de reflejar este blog, que desde un cliché, desde algo que todos creemos comprender o saber se puede llegar a algún lado interesante que nos permita reflexionar. Saludos, pasen y lean a su antojo.

miércoles, 29 de septiembre de 2010

La piedra en el molino


En la lucha, o el intento de la lucha ahí me encuentro. Leo Marx “La historia se repite primero como tragedia y después como farsa” No se si agradecer haber llegado a la hora de la farsa ¿Soportaría la tragedia? Hay un misticismo oculto en aquella generación pero si bien nos asombra, nos cautiva, nos atrae, incluso nos emociona; no nos comprende. No estamos adentro sino circunvalando su carisma. Debemos buscar nuestro propio fervor. Trabajar para encontrarlo. Es esta una búsqueda que quizás nunca concluya, una búsqueda épica o inútil depende siempre de quien la encare, que busque y que encuentre. Tiene de por si lo heroico de acometerla que ya es mucho para los tiempos que corren.

Leo a Stendhal: “La política es una piedra de molino atada al cuello de la literatura”

Yo pensaba esto sin saberlo y es que no pensamos nada nuevo sino que reciclamos pensamientos que nos atraviesan verticalmente. ¿Cómo debe usarse la poesía? ¿Debe usarse? ¿El objetivo debe trascender la herramienta?

Por suerte leo a Lamborgini: “…primero debe ser un poema, sostenerse como tal…” y me doy cuenta de que esto también lo pensaba. “Debe flotar”… recuerdo que hablamos con Ayuste (escritor) sobre la necesidad de ser radicales con los conceptos, de ir a fondo con lo que se dice, aun cuando a la larga descubramos que estábamos equivocados, pero ir a fondo, con todo, es la única manera honesta de cargar con esa piedra de molino.

Entiendo la estética por la estética, el arte per se, el gusto de escribir o de ver como un poema se cierra circularmente en un pequeño acto de perfección pero uno es lo que es (a Rose is a Rose, is a…) y hoy, aquí, con esta coyuntura (farsa o no) “flotar es necesario”, buscar que la palabra tenga valor y sustento es un compromiso y me recuerda a otra discusión con otro amigo sobre la necesidad, mas bien la obligación de despertar. Supongo que todo se resume en una pastilla azul u otra roja, en seguir o no al conejo blanco pero esa referencia que todos conocen y quizás pocos comprenden se traduce en la necesidad de hacer algo para que las cosas tan solo no se queden como están.

La espiral de mis reflexiones me vuelve a depositar al comienzo del camino amarillo. En aquella charla con Ayuste hablamos sobre la obligación de usar la palabra como extensión del acto y de no quedarnos quietos esperando que los acontecimientos se desencadenen sino que debíamos ser participes de ellos precipitándolos.

Quizás nos indignaba haber leído a Hölderlin y no estábamos cómodos en el rol de reveladores divinos (patizambos) o quizás tan solo repetía lo que de Urondo quedaba en mí (en definitiva somos lectores y repensantes de lo que leemos, somos parte de la diagramación de las ideas en su reflexión), pero lo cierto es que la discusión palabras nuestras o no; discurría por esos senderos y es que descubrí con el tiempo (el peine de los calvos) que al igual que los futboleros en un bar discuten ad eternum sobre los mismos temas, nosotros los poetas también lo hacemos. Y la piedra del molino es uno de esos temas.

viernes, 3 de septiembre de 2010

Los Salieri de Diego


Hay en la vida, para aquellos que nos gusta el deporte en general, pocas ocasiones de ver a los fuera de serie de cerca ya sea en patinaje artístico o fútbol. Uno suele estar tan enceguecido por la esférica y su mundo brillante que en ocasiones pierde la referencia y no se da cuenta de que hay otros deportes, otros jugadores que cumplen holgadamente con la condición de únicos. Quizás haya toda una generación que disfruto a Vilas (no me encuentro en ella) o quizás se pertenezca a otra que dejo pasar de largo a la inconmensurable Sabatini porque jamás traspaso ese 3 del mundo, sin dejar de pensar que arriba había un monstruo como Graffque le tenia miedo a Gabriela, quizás se pertenezca a la generación que disfruto de Monzon o Bonavena y quizás uno nunca se dio el tiempo para ir a ver a la Tigresa Acuña por prejuicios de genero que ya no corren por mas que sea ella quien genera una de las pocas ocasiones de volver a ver un Luna lleno al mas puro estilo Gatica . Lo cierto es que todos pertenecemos a la generación de Maradona y su leyenda. Esa que cuenta que dejaba todo por la celeste y blanca, la que habla de su tobillo como una naranja, la que escupe con bronca la puteada en la final del mundo y la que llora con el cuando le cortaron las piernas. Y esa leyenda que trasciende generaciones (piensen que hay chicos de 15 años que no lo vieron jugar y lo idolatran) nos hace pensar que este tipo de jugadores no se repetirá jamás y nos sumerge un halo de nostalgia y tristeza y esas lagrimas nos nublan la vista y el juicio porque gracias a Dios el deporte argentino (con su espíritu amateur, sus deficiencias institucionales, su potrero) ha dado en estos últimos 10 años jugadores y equipos que llevan impregnado en su carácter y en su mística la gesta de la que se conforman las leyendas. Cuando Nalbandian toma un avión y viaja faltando 48 hs a suecia para ganara sus puntos en la Davis, cuando en set corridos barre a 2 top 20 en Rusia encontramos esa mística que añoramos y que nos engañabamos pensando que pertenecia al fútbol y al pasado. Cuando Scola lidera a una generación dorada diezmada por las lesiones y promedia mas de 30 minutos en cancha, mas de 20 pts y 10 rebotes encontramos el liderazgo que creíamos exclusividad de una leyenda y un deporte, cuando a Luciana Aymar se le cuelgan 4 Coreanas del hombro, la asfixian, la golpean e igual con un amague sale de la presión para poner un pase gol y definir el partido nos rendimos ante el hallazgo de esa magia que creíamos pertenecía al balompié y a un solo hombre. El deporte Argentino nos regala, vaya a saber uno de que extraña manera, una leyenda nueva cada día y esta en nosotros saber apreciarlo pues solo nosotros seremos los perjudicados si dejamos la ocasión de ir a ver a estos fenómenos que cuando juegan transportan ese brillo que pensamos perdido. Por eso Señor, señora si usted esta cerca de Rosario agarre las cosas y vaya a ver a las Leonas porque este equipo le dará ese plus de Argentindad que usted creía perdido, si esta cerca de Turquía no se deje estar y vea no mas sea un partido de la “Generación Dorada” por más que no estén Ginnobilli o Noccioni y que Oberto sufra de una gastritis furibunda, le puedo asegurar que el equipo acompaña, no se doblega, acierta y desacierta por igual pero sobre todas las cosa emociona en esa lucha contra la adversidad en esa lucha contra el tiempo. No se deje estar y dese una vuelta y por último si aun le sobra tiempo y ganas y esta cerca (porque siempre hay algún argentino en algún lugar del mundo) pase por Paris y vea como La legión de Nalbandian intenta ante Francia repetir el milagro de Moscu. ¡Emociónese amigo que el deporte en su generosidad nos da una nueva oportunidad de volvernos a encontrar con lo que creíamos perdido! Vaya y aliente, disfrute y aunque perdamos siempre podrá decir que vio jugar a los Salieris de Diego que se multiplican en un país en donde crecen mil flores.

jueves, 2 de septiembre de 2010

¡Marchar o Morir!


maxchevallier

Con el tema de ésta entrega presentaremos 2 películas y un libro. Por Marcos Gras

¡Marchar o morir! Pocas cosas son más glamorosas que un puñado de buscavidas marchando en columna de a dos por las dunas del desierto del norte de África, fusil al hombre, quepis blanco y entonando bajo un sol de 40 grados una canción sobre una morcilla ´´Le Budin´´ mientras se dirigen a un fuerte en medio de la nada. La legión extranjera pareciera haberse hecho exprofeso para el cine y las novelas de aventuras.

Hoy vamos a marcar 2 películas y 1 libro cuyo argumento principal gira en torno a este cuerpo de franceses no tan franceses.

El primer libro que viene a mi mente cuando hablamos de la Legión es sin dudas Beau Geste el cual ha sido adaptado al cine en varias ocasiones pero si debo elegir alguna de estas adaptaciones sin dudas me quedo con la que protagoniza Gary Cooper en 1939. El argumento de este libro y de la película destila gesta, honor, compañerismo desde la primera toma o línea. Los hermanos Geste 3 paquetes de la alta sociedad quedan inmersos en un confuso episodio que gira en torno a un zafiro robado y cada uno por distintos motivos, aunque todos vinculados con el honor, decide enrolarse en la legión extranjera en donde convivirán con la flora y fauna del bajo fondo. Allí se encontraran con el Sargento Markoff encarnado por el maravilloso Brian Donlevy (esta actuación le valió una nominación al Oscar) quien se encargara personalmente de hacerle la vida imposible a los Geste. Este film llena cada uno de los requisitos de una pelicula de aventuras, tenemos gestos heroicos que nos producen envidia, muertes gloriosas, villanos y malvados, romance y escenas como la llegada al fuerte que solo pueden arrancar aplausos desde la platea.

Beau_geste

La segunda recomendación sigue de la mano de March or Die (1977) en donde se desparrama un elenco que quita el aire tenemos desde un joven Gene Hackman (¿es esto posible?) hasta un impecable Max Von Sydow pasando por la despampanante Catherine Deneuve, el jovencísimo Terence Hill o el eterno Ian Holm. La tensión del conflicto amoroso entre el Capitan Foster (Hackman), el buscavidas de Marco (Hill) y la hermosa Deneuve sirve solo de excusa para un film que retrata al son de la marcha Le boudin (usted terminara tarareándola créame) las largas caminatas sobre la arena caliente y la dureza de servir en un regimiento compuesto por la calaña del mundo pero que por algún motivo extraño representan en sus gestos ante el combate o la muerte la gloria de una Francia pasada. El sol, la arena, y los tiros hacen de esta película una maravilla del cine bélico o de aventuras. El trasfondo de los personajes, amargados, taciturnos, huyendo todos y cada uno de ellos de un pasado turbio esta magistralmente representando por este gran elenco y como no podía ser de otra manera aquí también desbordan los gestos heroicos que al final de cuentas cadáver mas cadáver menos es lo único que queda.

marchordie

La última recomendación nos adentra en el mundo de los comics con la aparición de Aquí la Legión (3 tomos) de la imaginación de Robin Wood y el dibujo de Luis García Durán. Aquí las aventuras de los legionarios del coronel Max Chevalier nos nutren con la esencia misma de la épica que buscamos cuando encaramos algo relacionado con la Legión extranjera. Pasados sombríos, secretos inconfesables, actos heroicos, muertes canallescas o gloriosas, amores imposibles, desierto, sol, sed y honor todo ello nos llega de la mano del genial Max Chevalier y sus cuatro oficiales: el Capitán Francis Didier, el distinguido Jacques de Fonternac, el oscuro René Bosch y el polaco-belga Kozakovitch. El fuerte de Sidi-Bel-Abbés es parte de nuestra nostalgia y si aun no lo es créanme que cuando termine de leer esta saga pronto se preguntara porque no hay más. Les dejo dos links para que se bajen algunos episodios de Aquí la legión y créanme no lo lamentaran 1 y 2

maxchevallier

En el tintero nos quedan películas como Mi bello legionario (1977), Fort Algiers (1953), Marruecos (1930) pero todo ello mis queridos amigos quedaran para otros artículos.


Publicado en el numero de septiembre de Avellaneda Virtual